Amable lector deseo llamar vuestra atención a las siguientes palabras del apóstol Pablo:
“Palabra fiel y digna de ser recibida por todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero.”
Palabra fiel dice el apóstol, palabra cierta, palabra que merece nuestra más absoluta confianza, diferente a las palabras de los hombres. Esta palabra, este mensaje que anuncia el siervo del Señor Jesús es palabra fiel, palabra que puede proporcionar una base sólida para nuestra fe y justamente esto es lo que necesita nuestra fe, pues está en juego el destino de nuestras almas.
La felicidad o desdicha eterna de cada persona, depende de lo cree.
Jesús dice:
“El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna.”
“El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán.”
Tal es la palabra que el apóstol nos entrega. “Palabra fiel y digna de ser recibida por todos”
El mensaje del Señor no va dirigido a algún grupo selecto de personas, es para todos, merece ser creído, recibido por todos.
He aquí el mensaje, la palabra fiel:
“Que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero.”
El apóstol Pablo se califica así mismo como el primero de los pecadores, reconociéndose como el peor, el más culpable de todos, sin embargo, antes de conocer a Jesús él se creía el mejor de todos, pues celoso de las tradiciones de su pueblo. Él practicaba con dedicación la religión de sus antepasados.
Fue al comprender el verdadero significado de la muerte y la resurrección de Jesús que todo cambio y él que había sido un mero religioso paso a ser hecho hijo de Dios.
Gozoso en la seguridad del perdón de todos sus pecados, sabiéndose poseedor de vida eterna anuncia el glorioso evangelio del inmerecido favor de Dios, el mensaje que ha llenado completamente todas sus necesidades espirituales.
Dice:
“Palabra fiel y digna de ser recibida por todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero.”
Esta palabra es digna de ser recibida por todos, no hay diferencia dice Dios por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios, no se equivoque ninguna persona pensando que el evangelio no le hace falta.
“Dios ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan “
Él dice:
“No hay justo no hay ni siquiera uno “
“Todos se desviaron “
“Todos están bajo pecado “
Frente a esta necesidad universal Dios proveyó al Salvador que es completamente competente para salvar a todo aquel que cree en Él.
Este salvador Cristo Jesús, no vino para enseñar una nueva religión ni para ayudarnos a llevar una vida más decente, vino para salvar a los pecadores, vino para salvarnos del poder del pecado que no destruye, que nos conduce a la perdición, vino para sufrir por nuestros pecados, para borrar nuestros pecados, para darnos vida eterna.
Vino, sufrió, murió, resucitó y vive todopoderoso salvador.
Te pregunto:
¿Es Cristo Jesús tu salvador?
¿Eres salvo por la fe en Él?
¿Has creído tú sinceramente, de corazón el verdadero evangelio?
Helo aquí
“Palabra fiel y digna de ser recibida por todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero.”
Guillermo McBride
